Nayra «No, de ningún modo iba a permitir que le sucediese algo a Nayra. No mientras aún le latiese el corazón.» Deja una respuesta Cancelar la respuesta Introduce aquí tu comentario... Introduce tus datos o haz clic en un icono para iniciar sesión: Correo electrónico (obligatorio) (La dirección no se hará pública) Nombre (obligatorio) Web Estás comentando usando tu cuenta de WordPress.com. ( Salir / Cambiar ) Estás comentando usando tu cuenta de Twitter. ( Salir / Cambiar ) Estás comentando usando tu cuenta de Facebook. ( Salir / Cambiar ) Cancelar Conectando a %s Notificarme los nuevos comentarios por correo electrónico. Recibir nuevas entradas por email. Δ